miércoles, 15 de junio de 2022

TÍMIDA APROXIMACIÓN A LOS RESTOS DE LA ERMITA DE SAN ONOFRE

Valle del Arroyo de Pedrique

Es imposible y debo darme cuenta de ello, intentar aventuras en solitario no es lógico ni oportuno. Ayer día 13, después de felicitar a los Antonios que conozco, por la mañana aprovechando el respiro que te da la solana temprano, pues aún el sol no ha asomado por la cumbre y puedes caminar en la sombra, y si de vez en cuando corre una tímida brisa, mejor. Enfilé el Camino de los Pañeros o del Monasterio de Pedrique, con cierta valentía pues es de zahorra el piso. Horno de Cal la Moheda y a los lejos el Cortijo de la Moheda. Sólo el susto personal del mastín del caserío que ladró, modificó el silencio a veces roto también en la lejanía por los vehículos a su paso por la N-432. Una piara de cerdos se acercó corriendo a la cerca pensando que yo era quien les traía el pienso. 

El recorrido

La Umbría del Huerto

El monótono "tutu tutu", de las torcaces, hace que se acuerde uno del chiste del moscardón y la siesta, y además trata de asociar la frecuencia del sonido con la temperatura, como si de chicharras se tratara. Está claro que la mente piensa en todas las tonterías. Pasado el cortijo la curva y el final del término municipal, ya estamos en el de Pozoblanco. A mi izquierda las cotas del macizo de Pedrique, con valores de 679, 666, 671, 664 y 708 m.s.n.m. el llamado Cerro de Pedrique. En la cota de los 550 m. aproximadamente están los restos a los que pretendía, reitero pretendía, aproximarme, porque el desnivel descarado y la altura de casi un metro del cereal silvestre seco, me aconsejaron no intentarlo. 

El olivar con el cereal silvestre seco

A lo lejos el Monasterio de Pedrique

Abajo el valle que configura el Arroyo de Pedrique, buscando unirse con el de Juan Rayo y los dos de la mano, secos, al Guadalbarbo. Precioso en la mañana limpia. A la derecha la Umbría del Huerto, apantalla el Arroyo del Cañuelo y la Umbría de Juan Rayo. Llegué por el Camino de los Pañeros hasta la vertical de los restos, pensando en la subida. Un álamo negro grafiteado por el amor de Tere y David guardaba el arroyo estacional. Vi unos restos desde abajo que no eran los que José Miguel, no sé si solo o acompañado descubrieron y cuyas fotos y proeza quedaron plasmadas en esta entrada del blog. Nosotros antes, lo habíamos intentado por un camino más a la izquierda que nos llevó a una encerrona de cercas arriba, publicado aquí. 

El grafiti en el álamo negro

Restos de otra casilla más baja ampliados

Comparativa de los desniveles y distancias

Pero a lo que vamos. en el papel por línea (Línea roja en la foto) recta 174 m de distancia y 90 de desnivel, lo que supone un 51%. Zigzagueando (Línea verde en la foto) por un olivar abandonado, que en la foto de satélite se ve limpio pero en la realidad ya he comentado que el cereal seco tiene más de un metro de altura, tenemos un recorrido de 376 m. pero eso sigue dando un desnivel del 25% aproximadamente. Con paciencia se puede hacer pero debería ser al amanecer, con mucha tranquilidad y varios. Yo solo no me atrevo desde luego. José Miguel me dijo que ellos o él, habían utilizado los senderos de los animales. Pero como no hay mal que por bien no venga el paseo mañanero ha servido para disfrutar del territorio, de la soledad, del paisaje y darme cuenta que mis posibilidades son las que son.

Fotografías del autor
Bibliografía del Blog

2 comentarios :

MariÁngeles Ortiz dijo...

Paco, confiesa... Con sustillo incluido! Jajaja
Me encantan los paseos mañaneros pero me conformo con mis 9 kilómetros de casco histórico y ribera.
El campo lo veo durillo

Un abrazo

Paco Muñoz dijo...

Mari Ángeles, no es prudencia es miedo muchas veces. No soy muy valiente y más solo. El otro día despues de haber bajado por una solanera me di cuenta que tenía que subir otra vez el monte con más calor, antes de meterme en un arroyo de agua sospechosamente sucia. Me mosquee desde luego. 9 kms. se sale de mis límites, el otro día fueron siete y algo y lo noté todo el día. El campo tiene otro atractivo que la ciudad. Un abrazo.