miércoles, 31 de marzo de 2021

EL CIEGO DE LA PUERTA DE LA JUSTICIA

Versos de Francisco de Icaza, Jardín de los Adarves

Tres añitos. Yo ya emperejilaba frases escritas, casi sabía leer, mi padre me había enseñado en casa. Vivíamos en Pinos Puente, era la primera vez que salía de Córdoba, bueno la primera fue a Cádiz, a la playa, pero si la primera vez que vivía fuera de Córdoba. Mi abuelo Rafael había muerto hace poco tiempo, corría el 1950. La foto es indiscutible porque mi madre iba de luto riguroso. El primer recuerdo que almacené en mi disco duro fue mi abuelo en la cama enfermo, y luego el velatorio, la habitación llena de sillas de enea, 1950 tenía setenta años, pero muchos kilómetros, sobre todo en coche de caballos de fiesta a Sevilla, como decía Rafalito el de la Taberna la Mezquita: -Niño tu abuelo ha sido el cordobés que más veces ha ido a Sevilla en coche de caballos.

Por la calle Reyes Católicos pensando, 1950

En Pinos Puente estuvimos dos veces, la primera de la foto en 1950 con tres años, y otra en 1953, que ya tenía seis. Ya había nacido mi hermana Loli, allí empezó a andar, entonces vivíamos con otro abuelo Antonio Muñoz Peña “Peñita” porque había hecho sus pinitos en el mundo del toro, eso sí sin pena ni gloria, era el padre de mi padre. Se habían mudado desde la parte alta de Pinos a la calle de Barrionuevo. Al lado vivía un sombrerero, yo me quedaba extasiado en la forma que hacía los sombreros y como en esas fundas los planchaba y luego exponía en una estantería. Nos visitaron otros hermanos de mi madre y fuimos a ver a la Alhambra. Subimos a la Torre de la Vela, entonces la entrada a la Alhambra era muy fácil, casi había dejado de ser casa de vecinos hace poco.

Campana de la Torre de la Vela

El espíritu de Washington Irving el de los cuentos, aún pululaba por sus habitaciones. Pero lo que más me impactó fueron los versos delante de un pasillo para subir a la torre, la de la campana. “Dale limosna mujer,/ que no hay en la vida nada,/ como la pena de ser,/ ciego en Granada./” Recuerdo que lo apunté en un papel. Francisco de Icaza se había inspirado en un ciego que tenía sus reales en la Puerta de la Justicia, y lo vio cuando fue a Granada con su mujer Beatriz de León de viaje de novios. Después nadie pudo conocer o saber del ciego de la Alhambra.

Entrada de la Alhambra 1961

Ángel Ganivet otro granadino universal, dijo de aquel ciego sordo mudo, de la Puerta de la Justicia: "¿Cómo pide si no habla/ si a nadie sus ojos miran?- No puede hablar, porque es mudo / habla su mano extendida; / ni puede ver, porque es ciego, / más su mano tiene vista / - Y, entonces ¿cómo no llora / lamentando sus desdichas?/ - ¿Cómo quieres que llore/ si están secas sus pupilas?". A Gallego Burin que era Director de Bellas Artes se le ocurrió poner una placa con los versos de Icaza en el Jardín de los Adarves. Este es uno de mis primeros textos leídos que recuerdo y que escribí, lástima no conservar el papel, fueron los de Francisco de Icaza en la hermosa Granada.

Jardín de los Adarves

Posteriormente han sido muchas las veces que hemos visitado Granada, una inclusive además de perdernos por el Albaicín, subimos a la Fuente del Avellano, la que mencionaba mi padre cuando me daba agua, siempre le ponía el titulillo de que era de la Fuente del Avellano. Por lo menos así la pregonaban los aguadores que la vendían por la calle, y la cantaba Antonio Molina. Granada es mucho Granada. En el viaje de bodas, “No encontré rosas para mi madre” fue un estreno que vimos en el cine Madrigal, cuyo patio de butacas temblaba cuando pasaba el tranvía, 1973. Ya ha llovido y el ciego sigue pidiendo limosna.

Fotos de mi padre y de Internet
Bibliografía del disco duro

lunes, 22 de marzo de 2021

DE YAMURES EN CÓRDOBA

 
Yamur de Alcolea Museo Arqueológico de Córdoba

Lo mejor del blog los comentarios, siempre lo digo, es de lo que más aprendo, lo que lamento es que muchas personas no se atrevan a hacerlos. Ejemplo, en la entrada de San Nicolás de la Villa se me escapó, vamos que no conocía la existencia de un yamur en el tejadillo de su cuerpo de campanas de la torre. De ello me puso un comentario Alfonso Gómez de "Corduba" en Facebook, y me envío unas excelentes fotografías mi buen amigo Paco Rojas. Luego procede iniciar la investigación. No hay mucho, una conferencia del arqueólogo y director del museo Prasa de Pozoblanco Juan Bautista Carpio, impartida en la "Pieza del Mes" en el museo Arqueológico de Córdoba, y otros artículos que existen por la red.

Giralda de Sevilla Almohade Alejandro Guichot

Mezquita de Marraquech

Entonces empiezas a ver yamures por todos sitios. El más significativo, para nosotros los cordobeses, es el llamado de Alcolea encontrado en el cortijo de Chanciller de Alcolea por Félix Hernández y citado en un trabajo de Torres Balbás y pieza en el Museo Arqueológico. ¿Qué es un yamur? El yamur, en la arquitectura islámica, es el elemento que remata la torre, en Francia es el Gallo, los cristianos es la cruz y los mahometanos el yamur y la media luna. Está compuesto por una barra vertical y tres o cuatro bolas o manzanas insertadas en ella, normalmente de bronce doradas y en tamaño decreciente, de abajo arriba. Puede tener dos tres o cuatro pero lo más habitual son tres y la leyenda los asemeja a los tres profetas del Islam, los más importantes, Mahoma, Moisés y Jesucristo. También representa a los diversos mundos sagrados islámicos; terrestre, celestial y espiritual.

Yamur iglesia de San Mateo Lucena

Iglesia de San Mateo Lucena

Al mismo tiempo sirve como elemento apotropaico de protección. Este término antropológico se usa para expresar el efecto cultural o mecanismo de defensa mágico, consistente en alejar el mal con objetos rituales y protegerse de los malos espíritus o algo maligno en concreto. En realidad la verdadera protección para los que somos más prácticos que espirituales y más laicos que religiosos, es que en la punta se instale un pararrayos, que de verdad protege del daño de las chispas eléctricas y las deriva a tierra. Pero aclaro desde un punto de vista laico y sobre todo práctico. En la arquitectura socialista de la antigua URSS, todos los edificios acababan en una aguja, símbolo del remate arquitectónico soviético.  

Yamur del convento de la Concepción Pedroche

Convento de la Concepción Pedroche

Lo que si está claro es que en la torre de San Nicolás hay un yamur, a pesar de que la torre según los estudios correspondientes y la placa conmemorativa, se construyó en el siglo XVI, en época cristiana, por lo no se comprende cómo se mantuvo el yamur. Luego está el de Lucena en la Iglesia de San Mateo, entre la Plaza Nueva y la Plaza de San Miguel, y el del Convento de la Concepción en Pedroche en la esquina entre las calles Monjas y Francisco Botelo, y el de la Universidad Islámica en la calle de la Hoguera. El del museo hay que verlo allí y en tamaño natural y casi puede tocarse (es un decir). Dice la ficha técnica muy poco, que salió de un supuesta mezquita de Alcolea, aunque la realidad es que se encontró, como hemos dicho más arriba en el cortijo de Chanciller, que ahora tiene delante el establecimiento penitenciario de Córdoba.

Yamur Universidad Islámica calle Hoguera (Paco Rojas)

Yamur torre de San Nicolás (Paco Rojas)

“Yamur.-Latón, 200 x 117 x 20 cm., S. X, Procedencia: De Alcolea (Córdoba). Comentario: Yamur o remate de esferas que culminaba los alminares de las mezquitas. Parte de un vástago central de sección cuadrada que a la altura de la veleta se achaflana y es atravesado por una serie de bolas de diámetro decreciente. Cada una de las cuatro bolas se construye a partir de dos semiesferas soldadas, manteniendo las dos inferiores dos líneas grabadas paralelas. Tres piezas cilíndricas, con moldura inferior y superior, separan dichas esferas, arrancando la inferior con una especie de base o pie moldurado. Tras ellas, en sentido ascendente, se ha instalado una veleta y se ha rematado el vértice con una cruz con tres patas finalizadas en flor de lis. El hierro presente en el eje es el material predominante, el latón de aspecto dorado es el que se ha utilizado en las esferas y las piezas complementarias. Su reutilización en épocas posteriores ha provocado la alteración de su forma original. Es un objeto con función decorativa, simbólica (que representa los distintos cielos) y protectora. Parece proceder de una mezquita de Alcolea (Córdoba).” 

Adenda:

Me dice un buen amigo en un comentario:  "...el Yamur que hay actualmente se cambió por el original en el 2003. En ese año yo trabajaba en una empresa de piedra artificial y nos encargaron hacer los modelos y moldes de las bolas y una vez que los hicimos nos dijeron que si los podíamos hacer en plomo. Con el autentico, no se lo que harían con él y si todavía lo conservan."

Es una buena pregunta la frase final que no podemos contestar, a lo mejor procedía la contestara Patrimonio de la Junta de Andalucía ya que al ser un BIC la iglesia deberá estar inventariado, aunque en el inventario del decreto no figura, o por lo menos yo no lo he visto. 

Fotografías del autor de Paco Rojas, Pedro de la Fuente e Internet
Bibliografía conferencia Juan Bautista Carpio "La Pieza del Mes", y Wikipedia.

domingo, 21 de marzo de 2021

SAN NICOLÁS DE LA VILLA

Grabado de Parcerisa 1885 Paseo de San Martín

Llegue una hora antes a hacer una gestión comercial a la calle Concepción, pensé que abrían a las nueve y lo hacían a las diez, durante esa hora decidí entrar a San Nicolás y fotografiar diversas cuestiones artísticas de esta iglesia fernandina. Posiblemente antes mezquita, aunque recientes estudios parece han descubierto muy pocos signos de esa cultura en la reforma de la torre. Ha sufrido desde su creación muchas modificaciones según diversos autores. Una de ellas a mediados del siglo XVI nos la detalla Paseos por Córdoba. Cosa curiosa sobre la cripta, el DECRETO 288/2003, de 7 de octubre, de declaración de BIC de la Junta de Andalucía, además de detallar el patrimonio mueble e inmueble en el mismo, ignora el subsuelo, como si no existiera, cuando no deja de ser una peculiaridad de esta parroquia. Pero es que la descripción de IAPH tampoco. No sé si ha sido exprofeso o una incompetencia del redactor de ambos informes o uno ha copiado del otro. 


Calle Torre de San Nicolás

Reparación en la citada calle

Catastro San Nicolás
 
D. Teodomiro Ramírez de Arellano dice: “En 1554 perdió la puerta del lado del evangelio, sustituyéndola con la actual, que fué preciso sacar mas fuera, por haber construido en terreno de la calle la capilla del Bautismo, y en 1772 se le suprimió la principal que estaba á los pies de la nave del centro, donde hoy el coro, y se levantó un fuerte muro de cantería para dar firmeza al edificio; junto á ella había una gran basa de piedra que debió servir para una estatua, con una inscripción romana que muchos escritores copian y Ambrosio de Morales tradujo en esta forma: ‘Esta estatua puso décimo [Décimo] Germeniano varon clarísimo consular de la Provincia de la Bética al valentísimo y benignísimo Príncipe Ntro. Sr. Constantino perpetuo vencedor, siempre Augusto y pusoselas como muy sujeto y dedicado á su divinidad y Magestad’.”

Exposición de 1929 Sevilla pabellón de Córdoba

Copia torre de San Nicolás que quedó en Sevilla

Paseo de San Martin y San Nicolás
 
Respecto a la esbelta torre sigue diciendo D. Teodomiro: “La torre de esta iglesia ha llamado la atención de cuantas personas entendidas la han visto, tanto por su gallardía, como por el gusto arquitectónico con que la edificaron: sobre una base cuadrada como de seis á siete varas de elevación, sigue un octágono de gran altura con un saliente arriba, adornado con ligeras y lindas labores y sobre él un horrible y moderno cuerpo de campanas, son cuatro, que desdice mucho de lo demás de la torre: llenando el ángulo saliente en la unión de la base y el octágono, hay unas medias pirámides y por cima unas esculturas de medio cuerpo, con los motes en letras góticas de Paciencia y Obediencia, cuyos bustos han dado lugar á ridiculas invenciones, como el decir que dos ladrones fueron á robar la iglesia y que en castigo á su atrevimiento se quedaron convertidos en bustos de piedra:
 
Altar mayor

Capilla Bautismo
 
Y continúa:” otra anécdota hay que parece fundada en datos históricos. Cuando se edificó esta esbelta y preciosa torre, vivian en frente los Sres. de Chillón, Lucena y Espejo, Alcaides de los Donceles, quienes viendo que desde aquella se rejistraría el interior de sus casas, se opusieron á la obra, entablando un pleito que ganaron los representantes de la parroquia, poniéndole entonces aquellos motes para decirles que obedecieran lo mandado y tuvieran paciencia, dejando que la torre dominara los otros edificios. En cuanto al tiempo de su construcción creemos bastante y mas satisfactorio al lector copiar la inscripción en caracteres cúficos [monacales] que tiene en el rincón que forma con la puerta, dice así: Esta torre fué fecha á costa de esta Eclesia en tiempo del Papa, sexto Alexandro, é de los muy altos Principes Don Fernando, é Doña Isabel, en tiempo que Granada fué de ellos tomada siendo Obispo Don Yñigo Manrrique acabose á XII de Maio demil é CCCC. é XC é VI años en loor de nuestro Señor Jesu Christo.”
 
Coro

Portada por San Felipe 
 
“El interior de esta parroquia presenta una vista agradable, pero nada mas; ha perdido casi por completo su primitiva arquitectura á fuerza de restauraciones y reformas hechas según el gusto de cada época y de la persona encargada de realizarla, que no trataba de imitar lo antiguo sino de hacer algo nuevo, si bien sin omitir gasto, por ser la fábrica la mas rica de Córdoba, como lo prueba el haber costeado la torre como dice la inscripción, apesar de tener en el lado de Oriente el escudo ó armas de los Manriques, que son unas calderas, por ser entonces Obispo el Don Iñigo, citado en aquella. En tiempo de este señor reedificaron todo el edificio, siendo esta la primera vez de que tenemos noticia: después en el pontificado de D. Martin Fernandez de Angulo, principios del siglo XVI, se ejecutaron varias obras, entre ellas el retablo del altar mayor, nuevo y del buen gusto de aquella época tan floreciente para las artes; mas no gustaría mucho cuando en el siglo XVII ó principios del XVIII lo sustituyeron con el caprichoso y estravagante que en la actualidad existe. En 1555 se edificó la capilla del Bautismo y se varió la portada, sacándola, como hemos dicho, á la plazuela, siendo obispo D. Leopoldo de Austria.

San Nicolás desde el norte (Google)

San Nicolás desde el sur (Google)
 
En el año de 1772 llevóse á cabo otra reforma, sin duda la que le hizo perder por completo su antiguo carácter: cerróse la puerta principal, arregláronse los muros, poniéndole el costoso zócalo que corre por toda la iglesia, ostentando variedad de mármoles, hicieron la portada de la sacristía, que con aquel acompaña y púsose el embaldosado azul, rojo y blanco que tan buena vista presenta. Proyectóse entonces y se llevó á cabo, por que la fábrica contaba con fondos para ello, por mas que vulgarmente se achaque á la liberalidad de un devoto, el construir un panteón subterráneo donde se fueran inhumando los cadáveres de los feligreses, cobrando derechos mayores por los nichos ó bovedillas, con lo que calculaban y con razón, que ese mas ingreso tendría aquella: acometióse la obra encargándola al maestro albañil Ambrosio Carrillo, quien, como á unas cuatro varas de profundidad, encontró varios gruesos muros de sillares, como de vara y media de largo y media de ancho, que sirvieron para el macizo de la puerta principal, y entre ellos una moneda gótica muy bien conservada, hecha en Córdoba, puesto que en uno de sus lados se leia Córdoba Patricia: llegó á feliz término la obra, y en la actualidad ven los pocos curiosos que bajan, una hermosa bóveda subterránea, con ciento ochenta nichos, unos ocupados desde antes de la prohibición de enterrar en poblado y otros vacíos; sin tener en la actualidad mas aprovechamiento que el de depósito de cadáveres y guardar algunos efectos.”
 
San Nicolás desde el este (Google)

San Nicolás desde el oeste (Google)
 
Un artículo de diario Córdoba de 16-10-2003 con fotografías de A.J. González decía: “Dos naves paralelas y una perpendicular forman esta cripta principal que antaño se usó para los enterramientos. En las distintas paredes existe un total de 171 nichos (con forma de cajón rectangular alojados en el muro y extraíbles). Por ahora se han preparado unos cuantos nichos, que en unos casos tienen capacidad para recoger catorce urnas y, en otros, veintiuna. Por 1.200 euros el derecho de uso para depositar las cenizas de un fallecido se prorroga durante 50 años y entre ambas partes media un contrato. 


Interior de la cripta (Córdoba A.J.González)

Hay estipuladas varias fórmulas (un nicho para una sola familia o compartido entre varias, con o sin reserva). En ningún caso el espacio se adquiere en propiedad y hay restricciones: sólo se tendrá acceso a la cripta en el momento del depósito y con la presencia de alguien designado por la parroquia, y no queda contemplada la colocación de adornos florales.” Lo que no sé es si tendrá validez lo escrito hace dieciocho años.

Torre y el yamur (Foto Paco Rojas)

Me dice un querido amigo, Alfonso Gómez Romero, otro enamorado de nuestra ciudad y administrador de una página de Facebook dedicada a ella, lo siguiente: 
“Mezquita de Abu Utman, Al Razi.
En el año 833 se produjo la primera ampliación de la Mezquita Alhama de Córdoba por orden del emir Abd al Rahman II. Debido a las obras que se estaban realizando, la oración de los viernes no se podía realizar en la Alhama, por lo tanto se tuvo que realizar en una mezquita de barrio hasta que las obras acabasen.
Según Al Razi, el 18-10-833 se realizó esta oración en la mezquita de Abu Utman. Pero ¿Dónde se encontraba esa mezquita?, tenía que ser en el arrabal occidental según Razi. Este Utman debería de ser un cliente de los Omeyas, que apoyó a Abd al Rahman I cuando llegó a Al Ándalus.

Tejadillo de la torre con el yamur (Foto Paco Rojas)

El yamur (Foto Paco Rojas)

Hay dos posibilidades, una la de San Juan y la otra la de San Nicolás. Según Félix Hernández, la primera no podía ser porque su alminar se construyó después del gobierno de este emir. Por lo tanto debería de ser la segunda, la de San Nicolás. Además esta última cumplía todos los requisitos: encontrarse cerca de la Alhama, estar situada en un barrio populoso y estar cerca de una de las puertas occidentales de la medina, la de Bab Amir (actual puerta de gallegos), llamada así porque tras las dos avenidas actuales se encontraba el cementerio de Amir, que fue el más grande de la Córdoba islámica. Fijaros en la foto que en la parte de arriba viene un yamur que es esa varita donde están incrustadas varias bolitas que representan a los emisarios de Alá.” Las fotografías al hilo de la aclaración me las ha facilitado mi amigo Paco Rojas, un excelente fotografo.

Fotografías del autor, A.J. González, Google, Paco Rojas grabado Parcerisa.
Bibliografía: Paseos por Córdoba Biblioteca Central, diario Córdoba, BOJA y aclaración de Alfonso Gómez Romero.

sábado, 20 de marzo de 2021

OTRA SUBIDA A LA TORRE DE VIGILANCIA FORESTAL DE LOS VILLARES

Torre de vigilancia forestal de Los Villares

El viernes procedía un paseo corto por la sierra y así ha sido solo 510 m. de subida a la torre de vigilancia forestal del Parque de los Villares (mayo 2015) de Córdoba, es la tercera o cuarta vez que subo a ese lugar. Hubo un tiempo que decidí visitar las distintas torres de vigilancia forestal de la sierra. Conozco esta, la de Villares Altos (junio 2015) y la del Cerro de la Miniya (marzo 2015), pero no he estado en la del Chaparral en Campo Bajo, y ahora que recuerdo la de la Loma del Sordo camino de Pozoblanco pasado el Calatraveño, allí subí con mi buen amigo Jose Antonio Cantos y un cantamañas, después de abrir y cerrar varias cancelas en el camino. Extraordinario paisaje del no menos extraordinario y hermoso valle de los Pedroches.

Pista de subida a la torre

Torre

Torreárboles desde la torre

La jara negra nevada de blancas flores y la blanca de violetas manchas. Pero volviendo a las torres no debo olvidar la asignatura pendiente de subir a la Torre de la Loma del Parralejo con vistas al pantano de Puente Nuevo y al valle del Guadiato, visible desde muchos puntos del territorio, como no podía ser de otra manera para que cumplan su función de vigilancia forestal. Nada nuevo, igual que en la antigüedad vigilaban la presencia del enemigo y daban el aviso al castillo y poblaciones afectadas, en esta ocasión el enemigo es el fuego y el aviso a los sistemas de protección. Con medios distintos a los de señales luminosas o de humo. Pero igualmente efectivos. Con estos servicios se evita que el monte del Sr. Conde arda, pues nosotros también somos alícuotamente beneficiarios por el aporte de oxígeno a nuestras vidas. 

Torre de Villares Altos

Torre del Cerro La Miniya

Emplazamientos otras torres del entorno

37 m. de desnivel en 510 metros de recorrido cómodo, arrojan un porcentaje de 8 % de media, por eso lo de cómodo comparado con el casi treinta por ciento de la subida al Castillo de Belmez. La majestuosidad de Torreárboles por su cara oeste, está casi al alcance de la mano. Por detrás hacia el oeste el Cerro de Pedro López y más al oeste pero con tendencia al sur Castripicón. Si miramos al norte en línea recta a 18,300 km. la Loma del Parralejo y la otra casilla citada en el párrafo anterior, el norte está muy bien definido en la corteza de los pinos centenarios, el musgo hacia ese punto cardinal. E inclusive la Loma del Sordo 933 m. de cota, que está a 36,200 km en línea recta se vislumbra, no sin antes dirigir la mirada hacia el patriarca de esos lares, La Chimorra con 959 m.s.n.m.

Pedro López

Un animal que huye parece el plano del Parque

Riscos de Vera o del Guadalnuño

Por el sur y el este el horizonte es más atractivo o igual cuando menos, los picachos de la sierras de Jaén, Mágina y Cazorla y Segura y las Villas, Peña de Martos y el Ahillo de Alcaudete, Sierra Nevada, Parapanda, las Subbéticas y el techo provincial la Tiñosa, el Torcal en Antequera, la Sierra de las Nieves, y todas las que figuran en los mapas del territorio por allí, incluyendo la de Grazalema, unas perfectamente localizadas y otras sospechada en su brumosa localización. Lo cierto es que el panorama merece la pena. A la izquierda del camino de subida a la torre, el Sendero de la Tranquilidad que no hacia honor a su nombre pues un nutrido grupo de personas rompía el toponímico. Luego un nutrido perol del día de San José ocupaba lugares del Parque Forestal en su zona noreste. Coche y bajada a la ciudad.

Fotografías del autor
Bibliografía del Blog Notas Cordobesas.

sábado, 13 de marzo de 2021

OTRA VEZ EL CASTILLO DE BELMEZ

La bonita calle y el castillo

Hoy hemos estado en el castillo de Belmez o Bélmez, aunque vamos a seguir las recomendaciones de los oriundos que se suponen lo saben mejor que nosotros. Si quieren ver la opinión de los belmezanos lean el Blog de los compañeros de La Maquinilla sobre la palabra. Belmez es una palabra como muchas de nuestro idioma de raíz árabe y significa “lugar protegido”, por otra parte Velmez se incorporó al castellano como la vestidura que se ponían sobre la camisa para proteger que las guarniciones causaran molestias al cuerpo, luego seguía siendo protección.

El castillo visto desde el satélite de Google

Desde abajo

La senda de subida

Casi arriba

Yo estuve hace casi tres años, el día 25 de mayo de 2018, y hacía frío como para parar un tren. Una mañana cogí el coche y me planté en el castillo, solo. Ya habíamos visitado en una ocasión el museo minero y el dolmen Las Casas de D. Pedro, y el pueblo en otra, pero nunca el castillo. De esa visita publiqué en el blog la entrada el Castillo de Belmez, la que acompañé de los datos que pude recopilar sobre el mismo, por lo que no me parece adecuado hoy volver a repetir los mismos.

El penúltimo tramo

La torre del homenaje

La torre y la puerta de la torre

Tres años más de los que teníamos entonces se notan bastante, si le sumamos los problemas de salud y el desnivel considerable que tiene la subida (en 290 m. subimos 73 m. luego el desnivel es del 28%) el cóctel es perfecto. Lo que sí ha acompañado ha sido el tiempo, a pesar de ser los últimos días del invierno la temperatura ha sido primaveral, incluso se puede decir que hacía calor durante la bajada. El paisaje que se ve desde el castillo es impresionante.

Subida a la segunda planta de la torre

Lado norte, Belmez, y al fondo el lago de la mina Aurora

El cementerio, el campo solar del Cañal y Peñarroya

Al sur la presa del pantano de Sierra Boyera, y se supone detrás la aldea de El Hoyo, en uno propiamente dicho formado por la sierra de los Santos y de Gata, quien sabe si un antiguo cráter. La línea del ferrocarril traza el territorio camino del destino hasta hace poco de Puente Nuevo, a llevar la alimentación de las calderas de la central. Hoy con orden de parada. Al noroeste Peñarroya y su brillante peñón rojizo. Antes el campo solar del cortijo del Cañal. 

La cantera que pudo acabar con la roca 

En la fachada oeste el nombre de un tonto

Interior de la torre este

Al oeste Fuenteovejuna, destino trágico del comendador. Al sureste me pareció visualizar la cubierta del dolmen Casas de D Pedro, un pasado prehistórico, que no visitamos por tener que vadear dos cursos de agua, uno el Guadiato y otro el arroyo del Fresnedoso, la solución mucho rodeo de camino terrizo. Al este los cinco picos de Sierra Palacios y por los cuatro puntos cardinales todo el antiguo esplendor minero. Sin olvidarnos del caserío belmezano debajo. Y al fondo, por el este Espiel y el lago de los pozos de la Aurora y Belmez. Al norte la carretera CO-440 camino del Valle de los Pedroches por Cabezos Gordos.

Ordep Osonier es el seudónimo de Pedro Reinoso que, al igual que el gran Leonardo invierte las palabras. Como es una fotografía literaria de la villa, la publico para conocimiento de los lectores.

Rocas en la roca

"Belmez

Belmez quiebra el ánima del viajero que se asoma a estas tierras del valle del Guadiato. Faro inexpugnable y agreste de faldas albas tornadas de rojo. Piedra y cal que se derraman hacia el valle buscando la frescura del río. Iberas, Romanas, árabes y cristianas fueron sus nacencias, y su ser mismo, al amparo de una tierra donde la caza era abundante, el agua bendecía las huertas, y las ganaderías disfrutaban del encinar y las abiertas dehesas. La minería anduvo presente desde muy antiguo: cobre, hierro, plomo y... hasta oro y plata eran portados desde sus feudos (limítrofes entre la Bética y la Lusitania) a través de la vieja calzada que unía Corduba con Emerita Augusta. 

Subida con silueta

Cuentan las crónicas que los árabes fabricaron castillos, fortalezas y torres vigías al paso de los caminos por este valle y que uno se llamó de Ben-Aídar (Benaidar para Isidri) o Viandar, del que dijera Alfonso Onceno en su Libro de la Montería: “La Sierra de Los Santos, que es cerca del castillo de Viandar, es buen monte de osos (...) Et son las armaduras, la una en el Foyo de Viandar, et la otra en las Navas de Doña Rama..” , otro llamose de Zuheros y su ubicación pudo estar en Sierra Palacios y a otro diéronle por nombre Bel-Aljímez, Beb el-méis o Belmez, según distintos autores, del que una crónica árabe de 1215 narra: “...Y aprovechaba el inquieto rey castellano, Fernando III, las desavenencias de los tres príncipes andalusíes: Muhammad Aben Hud, Gyomar Zayyán Mardánix y Muhammad Aben Yúsuf Al Ahmar, para recorrer la tierra y quemar alquerías y pueblos (...) y ésta se veía favorecida con la tiranía y rapacidad de algunos desalmados alcaides y walíes. (...) así sucedió en Belmez (Córdoba) donde los enemigos castellanos entraron y pasaron a cuchillo a los moradores sin perdonar a mujeres ni a niños.”

Un panel aún casi intacto

Conquistadas estas tierras por los cristianos, en virtud de un tratado firmado por el padre de Alfonso III, la Orden de Calatrava toma posesión del Castillo y su territorio: “Fernando III da a la Orden de Calatrava y a su maestre Ordóñez la villa de Priego de Córdoba para cuando sea conquistada a los musulmanes y el territorio comprendido entre Mochuelos Guadalmez a cambio de los castillos de Monfrag, Bélmez, Elada, la torre de Cañete y el territorio entre el arroyo Guadamora y el río Guadalmez dejando a salvo los derechos y privilegios del Convento de Córdoba y de los calatravos en Chillón.”

Escalera con baranda

De mano en mano, entre Córdoba, la Orden de Calatrava, y otros señoríos, anduvieron estas tierras y fue grande y extensa su demarcación, de tal que el arcedianato de la Sierra de Córdoba (luego conocido como “de Pedroche”) era llamado de Belmez. Fue corriendo el año de 1579 cuando Belmez recupera la jurisdicción civil y criminal, bajo pago de una cantidad en metálico a Felipe II, si bien la Orden de Calatrava se reserva “...visitar en cada dos años una vez dicha villa, residenziar sus alcaldes, ofiziales y demás ministros, quentas de Propios, Pósito y caudales públicos de ella, y las penas de cámara”. En las alturas, el castillo vigila incansable el quehacer de estas gentes... Por sus faldas resuenan las luchas de moros y cristianos... y el viento inspiró estos versos fraguados al asiento de sus piedras…

Primera torre y tercera puerta

Nacido de la piedra y por la piedra
abrupto y altanero sobre el valle
mostrando tu pretil por cada calle
clavando tus raíces en la tierra

Glorioso canto que tu cima encierra
tañido por los pueblos que te amaron
y al pie de tu corona colocaron
semillas de la vida, nacidas de la guerra

Íbero, romano, árabe y cristiano
moriste y naciste al pairo de la historia
Puerta, valle, refugio, bello almez
Vigía del camino, fuerte, baquiano,
minero y heredero de la gloria
Bel-Aljímez, Bélmez… Belmez

Ordep Osonier (Pisquitos Cordobeses)"

Fotografías del autor y C. Carnago
Bibliografía citada y artículo de "Pisquitos cordobeses" de Pedro Reinoso