jueves, 13 de abril de 2023

92 ANIVERSARIO DE LA PROCLAMACIÓN DE LA II REPÚBLICA ESPAÑOLA

Alegoría de la República
(Teodoro Andreu 1931)

1931 a 1936 II República española, 5 años. 1936 a 1977 dictadura fascista, 41 años. 1977 a 2023, transición, monarquía borbónica, 46 años. El 14 de abril de 1931 se proclamó la II República española y marchó a un exilio incruento la monarquía borbónica. Hoy 14 de abril de 2023 hacen 92 años de esa proclamación, y sigue la esperanza que generó el régimen republicano. El impulso que se le dio a la cultura fue excepcional. 

La bandera tricolor

Hay que tener en cuenta los palos en las ruedas que le pusieron, a pesar de que la II República fue mayoritariamente de derechas, solo cuando ganó la coalición de izquierdas con el Frente Popular, el fascismo con el ejército, la sotana y el casino, dio un Golpe de Estado (con la ayuda de Alemania e Italia, y el abandono de las democracias occidentales), y fue el culpable de los cientos de miles de muertos y exiliados que ocasionó. 41 años duró oficialmente y 87 de facto, pues las mismas oligarquías familiares y los poderes fácticos, siguen controlando el país. 

Una peseta 1934

Hoy tenemos una democracia incompleta, en un barco que, a mi modo de ver, tiene muchas vías de agua. Pero no debemos de perder la esperanza, porque si la democracia es el menos malo de los regímenes, la República es el menos malo de los sistemas de gobierno. Es cierto que los españoles somos un pueblo especial, difícil de gobernar, y a las pruebas históricas me remito, y como decía Julio Anguita la III República no vendrá sola. 

Un real (25 centimos)

A la II República la trajo la corrupción de los Borbones, y fueron muchos intelectuales inclusive de derechas quienes la impulsaron. Luego para seguir siendo fieles a las costumbres de nuestro país de sonadas militares, el fascismo, la iglesia católica, militares traidores a su juramento y la burguesía, acabaron con ella de una manera terriblemente cruenta. 

D. Niceto Alcalá-Zamora

En este modesto blog todos los catorce de abril desde hace trece años recordamos la efeméride. En estos tiempos que se pretende darle la vuelta a la historia, por lo menos ponemos un granito de arena esperanzador para que no se olviden esos años y tampoco a los cientos de miles de personas asesinadas por ser republicanas, muchos que siguen desaparecidos en fosas comunes o cunetas. Y a sus familiares se les sigue negando el pan y la sal, e impediendo los entierren con los suyos, muchos que se titulan cristianos. Que no te digan que hay que pasar página que no, que sus muertos están bien enterrados y con honores la mayoría.

D. Francisco Largo Caballero

martes, 11 de abril de 2023

TORREÁRBOLES SIEMPRE AHÍ.

Torreárboles

La enfermedad y el carnet de identidad nos limita cada día más. Ya no es sólo el cáncer del que afortunadamente vamos pasando los controles periódicos, son otros achaques accesorios, como la vista; incipientes cataratas, bloqueo cardiaco con crisis de arritmias cuando le parece, y otras cuestiones que por ser menores aparentemente no son menos. Y sumado a todo está la pérdida de vigor físico, esto culpa del DNI. Es inútil negarlo. Por eso subir al techo municipal, Torreárboles, significó el otro día una proeza senil. Coche hasta las Malagueñas y sendero por la linde de Villa Alícia hasta la cota máxima, hasta el vértice geodésico. La última vez que subí lo hice solo y estaba recién arada la linde por cuestiones normativas, que habían arrasado el bonito camino tunelado entre jara, labiérnago y otras especies.

El Vértice y el Pedroches

Las Huertas de Cabra

Nos cruzamos, mejor nos adelantaron dos parejas, una seguro siguió por la vertiente oeste pues no la vimos más, y a la otra nos la encontramos arriba, esta fue la que nos fotografió, y nosotros a ellos. Luego después de disfrutar de las vistas, 360º de serranía, con las Huertas de Cabra en el cauce del Pedroches a nuestros pies, y contar la anécdota de aquella mañana casi de madrugada, en la que sentado en el borde mirando a Córdoba se dejó venir un parapente de la zona de los Villares, que casi rozó la cima, nos saludamos por la cercanía diciéndonos buenos días y luego él se alejó por la vertiente del arroyo más importante de Córdoba, en dirección a la ciudad.

Vertiente oeste

Vertiente sur

En otra ocasión avisé desde allí arriba de un conato de incendio que afortunadamente no fue a más. Siempre me acuerdo de cuando siendo un niño, tendría doce años, subí con Julio Galisteo, un amigo de mi padre, con el que trabajaba, después de haber estado en Cerro Muriano un par de días. Conocimos todos los alrededores y subimos a Torreárboles a campo a través por los terrenos de Villa Alicia, que entonces no estaba bunquerizada. La anécdota es cuando Julio, corría que se las pelaba ladera arriba diciendo que le había mordido una víbora, afortunadamente fue una avispa terrera, que dolía tambien lo suyo. Ese año 1959 fue el de Planes de Estabilización del gobierno fascista y puesta en órbita de satélites americanos, que entonces le iban a la zaga del soviético, ah, y Bahamontes ganó el Tour de Francia.

Fotografía de 1962

El día de Torreárboles y Pedro López

Luego han sido más veces la subida al monte que vemos desde cualquier sitio de Córdoba, y que no deja de ser siempre un atractivo. Otra circularmente por el camino inferior, nacimiento del Arroyo de Linares, para subir por el lado oeste y bajar por el este. Encuentros con ciervos en la linde, con susto por ambas partes. Incluso una vez subí en Land Rover con unos amigos, José Antonio y Miguel, por el sendero interior de Villa Alicia, para reparar un sistema de radio en una caseta de la cumbre. Pedí bajarme en una gran pendiente, y así lo hice, porque me dio miedo de que volcara el vehículo. Luego la bajada fue peor. 

Dos biólogos y un poeta

Los viejos del otro día

Otro día con otros amigos subimos a Torreárboles y a continuación a Pedro López también, los dos de una tacada. Claro algo más joven no mucho pero algo. Otra vez subí con un poeta excepcional y un par de excelentes biólogos y el perrillo de uno de ellos. La realidad es que todas las subidas han sido especiales. Una que lo hice desde la N-432, fui amenazado por un matón barato que manejaba un Quad  en las cercanías de la Ermita. Los denuncié al cuartel de la Guardia Civil de Cerro Muriano, y lo de siempre: -No los podemos coger. Cuando muchos senderistas estamos hartos de coincidir con ellos y claro como no hacen ruido, pues por eso. La zona de Barrionuevo está destruida por sus ruedas. Y sin ir más lejos subiendo en esta ocasión, Conchi y yo nos vimos sorprendidos por tres motocicletas que bajaban por la vertiente este. Se dieron la vuelta a confrontar con nosotros. Y esta es la corta historia de la última subida al techo de Córdoba.    

Un poco sobre el entorno: