sábado, 12 de marzo de 2016

CENOTAFIO DE LA HUERTA DE QUITAPESARES


Días atrás me llamó mucho la atención de la historia del cenotafio de Quitapesares, los comentarios de Antonio Lucena y Luisa Salcedo, uno por conocer la historia venida de sus abuelos, y la segunda por haber vivido alguna temporada en la Huerta. Ambas conversaciones me dejaron un sabor de boca que me obligó a seguir pensando en encontrar algo del monumento, en una palabra me incitaron a buscarlo.

Plano militar de 1893 donde figura la palabra panteón

Entrada al cenotafio, donde muy bien Tarzán podía ser el portero

Me he recorrido varias veces lo que queda sin edificar de la finca, hasta las lindes con lo que era Vilanillo, Sta. María y el Carmen, y en esas vistas no encontré lo que buscaba. Sin embargo la otra noche investigando en un mapa militar observé que en el ángulo norte de la finca, estaba casi borrada la palabra "panteón". Estaba claro, los topógrafos militares lo habían llamado como era. El plano es militar de 1893, siglo XIX. 

 Monolito central del recinto, entrar allí un problema

La cruz, hay que hacer un esfuerzo de voluntad para verla.

Vuelta a Quitapesares, esta vez con Conchi, que me ha resultado ser una especie de talismán en el asunto y además en el día de su cumpleaños. En principio estuvimos visitando otros lugares que también estaban pendientes de buscar y que encontramos. El sistema hidráulico de la finca, que es colosal, no he visto otro igual. Y las ruinas de una casa que estaba en la finca Vilanillo o Matamilanos (según los confusos toponímicos).

 La columna central

Detalle de la columna central

Vimos unos muretes cercanos a la finca que es donde yo me imaginaba podría estar. Nada. He de decir que el plano militar sólo ponía "panteón", y no habían coordenadas geográficas para utilizar instrumentos, sólo había que patearse un terreno en cuesta, con una vegetación considerable. Estando parados en un sendero sentimos un fuerte tropel y como es lugar de jabalíes pensamos que era uno que habíamos levantado.

Círculo de mampuesto

 Ahora se puede ver mejor la cruz
Pero no, era un potrillo que jugaba por los alrededores con congénere suyo (no puedo precisar si su madre). Cerca estaba Marcos, la persona que los vigilaba. Le pregunté y amablemente, después de terminar una larga conversación telefónica que mantenía, nos indicó que sabía dónde estaba el lugar. Él pensaba que las máquinas habían arrasado el sitio (las máquinas al servicio del ladrillo, que son las que han barrido: El Carmen (Santa María y Vilanillo) y Pretorio (Segovia, etc. etc.)).

La entrada

Los problemas para entrar

Afortunadamente, después de un primer intento erróneo, nos llevó hasta el cenotafio. He de decir que cuando se busca algo y se encuentra, es una  una sensación muy especial la que se siente. Allí estaba el cenotafio de Quitapesares, comido por la maleza, como puede verse en las fotografías, casi invisible, y muy difícil de fotografiar entero. Con la columna central con la cruz metálica arriba, y sus dos columnas en la entrada. Tres cipreses señalan la línea del camino desde el sur.

 Tres cipreses en línea

 El potro trotando

Es un círculo de mampuesto, de aproximadamente un metro de altura y tres de diámetro, con un acceso y dos columnas cuadradas a modo de jambas a los lados, coronados con una moldura. No puedo precisar si encima de la moldura a cuatro aguas de esa especie de jamba, tendría una bola o cualquier otro detalle. En el centro otra columna, a modo de monolito, de metro y algo de altura, similar a las citadas, pero algo mayor, con una cruz de hierro cilíndrica encima, de unos dos metros y medio de altura. 

Ahora con su congénere mayor

La esperanzadora naturaleza

Afortunadamente no habían llegado las máquinas allí, y estaba todavía el cenotafio que el propietario de Quitapesares habían construido para enterrar la memoria de su amor desdichado -siempre según la historia-. Lástima que las fotografías no hagan justicia del conjunto, por la cantidad de maleza que lo oculta. Lo primero que se me ocurrió es limpiarlo y poder verlo mejor en todo el esplendor que aún le permite el tiempo. Con la limpieza lo más seguro es que nos encontraríamos más cosas. Pero de momento ya hemos encontrado lo principal, el cenotafio de Quitapesares y estado en él.

 Chalets de Antas, Proyecto Hombre, Sanatorio Morales y Torreárboles

Santa María y el antiguo noviciado

Por otro lado la tristeza del lugar la alegra la primavera de la vida con un nido de pájaros. Y las vistas. Mirando al norte, como siempre Torreárboles al fondo, el sanatorio, el edificio del Proyecto Hombre y los tejados de los primeros chalets de la calle Antas. En la otra fotografía, el chalet de Santa Maria, y el antiguo noviciado de los jesuitas.  Las vistas desde allí merecen la pena pues está en la cota de los 330 m.s.n.m. Otro hermoso lugar de nuestra historia local cercana y nuestro patrimonio.

Adenda

Despues de desbrozar un poco la maleza y zarzas de alrededor.

Entrada (ya no está Tarzán)

Columna central


Fotos y boceto del autor, plano de los planos militares de 1893
Agradecimiento a Marcos por su inestimable ayuda

2 comentarios :

Emilio F. dijo...

Paco cuando sabia de tus investigaciones sobre Quitapesares,no me imaginaba que la cruz aun estuviese en pie....Increible!!! Un lugar con una historia peculiar digna de novela o pelicula...seguro que si se investigara mas a fondo tendriamos una historia que riete tu de la torre malmuerta :-) enhorabuena!! Como buen investigador las casualidades(lo digo por el dueño del caballo) y causalidades terminan dando resultado..y eso con el impetu que le pones no es de extrañar un saludo..

Paco Muñoz dijo...

Emilio muchas gracias. Si llamativo es este asunto, lo es más el de las albercas, son colosales. Tendremos que ir más veces. Bueno la diosa casualidad siempre ayuda bastante... a los que buscan. Un fuerte abrazo.