Los dos establecimientos
Como consecuencia del proceso de rehabilitación al que voy todas las mañanas, -consecuencia del atropello que sufrí en marzo, por parte de una persona que no me vio intentar cruzar por un paso de peatones-, paso un rato por el centro de la ciudad, donde se ubica el gabinete de fisioterapia. Ese tiempo de espera y aprovechando el limitado frescor de estos amaneceres (son las siete y media de la mañana) me sirve para repasar la memoria. En la calle Victoriano Rivera (Nadie sabe que se llama así o muy poca gente) conocida por calle La Plata, me encuentro con dos establecimientos que tienen el mismo nombre -ignoro si serán del mismo propietario-, la antigua marisquería El Puerto, donde podía verse muchos días el sombrero característico del Pipo, apoderado de Manuel Benítez cuando dejó de ser El Renco, para ser El Cordobés.
Un cartel
Unos carteles en las cristaleras que se prestan a dudas, pero otros aditamentos carteleros como dos banderas de España y tres estampitas religiosas católicas, confirman el sin duda del título. Dos señores con cara de perro uno con corbata roja y otro con corbata azul, y la leyenda “Mismo perro distinto collar”, señalan quiero entender al bipartidismo. Otro cartel que dice: “Elecciones: F1-Pantomima. Celebrada cada cuatro años para legitimar de forma fraudulenta el régimen autoritario en el que vivimos. Tendido 7”, y el más dudoso, el instrumento de Monsieur Guillotin, con la leyenda: “Quizás haya llegado el momento de que sea el pueblo el que comience a hacer recortes”. El primero nos puede servir a todos, el segundo no lo permitiría el fascismo, y el tercero es evidentemente revolucionario. Arriba tres estampas de catolicismo puro.
Otros carteles
En otro escaparate dice: “¡Despierta!*La democracia no existe. *Las elecciones están manipuladas.*Los grandes fondos controlan los gobiernos. *Los políticos marionetas ¿Qué puedo hacer? Paga siempre en efectivo”. Y una lista de pegatinas de tarjetas bancarias. Critica el dinero de plástico y dicen que la democracia no existe, si no existiera no podrían poner este tipo de carteles sediciosos, estarían cerrados por los fascistas. Y en otro dice: “Los mayas cada vez que ocurría una epidemia o catástrofe sacrificaban a los dirigentes políticos como ofrenda a los dioses. Este establecimiento se rige por el ‘Comité de expertos’ del gobierno de España. Definición de OMS. Organización de Mamporreros Satánicos. Cuánto más corrupto es el país, más leyes tiene. Tácito. ¡Tiranía Mundial! Dame una caja de PCR y dime dónde quieres que un rebrote y así de fácil impone una cuarentena a un barrio, una ciudad, una provincia, un país, o al mundo entero. El tiempo que quieran, cuando quieran. Los pensamientos son libres, Córdoba 16 de mayo de 2020, -Pedro Varela”.
Otro
Como se ve negacionismos a ultranza y crítica a las medidas de sanidad en epidemias del gobierno durante la pandemia. Y ¿quiénes criticaban estas medidas? No es necesario señalar, está meridianamente claro. Todo ello enmarca a un títere con mascarilla. Y no nos olvidemos las dos banderas patrias que custodian el nombre comercial. Dos bonitas fotografías antiguas, una de la calle de la Plata y otra del establecimiento que se llamaba Negresco. No hay dudas, por si las generaban algunos carteles de los señalados. De revolucionarios poco, pero que cada uno se haga su composición de lugar. Aunque se presten a error. También lo hacían los programas electorales de partidos de derechas y fascistas, que los escuchabas en los espacios gratuitos televisivos electorales, y creías estar escuchando al Che Guevara. El nacional catolicismo parecía anticapitalista, y el nacional socialismo era fascismo puro.
Fotografías del autor
Bibliografía cartelera