sábado, 13 de enero de 2024

OTRA VEZ EL SUCIO HORNO DE CERÁMICA DE OLLERÍAS

Sucio horno

Catorce años han transcurrido desde la publicación de una entrada en el Blog que se llama Hornos de Ollerías, concretamente en Febrero de 2010. Instalaciones industriales que dan nombre a la gran avenida que antes tuvo el nombre de un obispo colaboracionista con el Golpe de Estado del fascismo en 1936, lo que esa institución religiosa llamó en las lápidas del trascoro de la Catedral, “revolución marxista” (ahora está más dulcificado). 

Exposición de jaramagos

Pue bien entre la calle dedicada al dramaturgo Eugenio D’ors -calle surgida de la operación de ladrillo de la venta y urbanización de gran parte de los terrenos de los carmelitas-, y la de aquellas personas Héroes de Chernobil, que dieron su vida porque la contaminación radiactiva para el mundo fuese menor, como consecuencia del accidente nuclear de la central ucraniana, hay un pasaje escalonado y con rampas, menos abandonado que el yacimiento pero también algo dejado, que arriba contiene los restos de un horno de cerámica, como hemos dicho símbolo del nombre de la gran avenida.

Desde otra perspectiva

En mayo de 2022 publique otra entrada que se llamó “El sucio horno de cerámica de Ollerías”, y que dos años después hemos visitado, continuando el abandono y la suciedad, que si bien es verdad que la producen ciudadanos vándalos, también lo es que la administración cercana, el Ayuntamiento podría actuar de vez en cuando, en la exposición de jaramagos que se ha convertido. El cartel explicativo que tiene la firma de Vallehermoso, empresa constructora que edificó y seguro ganó algo en la rehabilitación del lugar, está totalmente destruido. 


Hasta arbolitos

Quitar la maleza que tapa los muros, y limpiar de latas y suciedad el yacimiento de esta ciudad con cuatro títulos de Patrimonio de la Humanidad, y restituir la señalética, no estaría de más, y no tiene un coste elevado. En el 17º Congreso Mundial de la OCPM que se celebrará este año en Córdoba, sería una buena idea llevar a los participantes a visitar este yacimiento. O por el contrario sería un buen motivo para adecentarlo por si algún visitante quiere hacerle unas fotos y que quede el consistorio malamente. Con menos hemos visto en otras ciudades presumir de patrimonio. Ojalá lo limpien.

Fotografías del Autor
Bibliografía del Blog.

2 comentarios :

RAFAHELL dijo...

Independientemente de la dejadez de las instituciones, las pasadas, las actuales y las venideras, nos falta mucha educación cívica. Las papeleras no se usan, la basura se deja junto a los contenedores porque debe costar mucho esfuerzo levantar la tapa para depositarla dentro, y sin embargo usamos el primer "agujero" que vemos para llenarlo de latas vacías y demás porquería, aunque se trate de un horno califal. Ayer, sin ir más lejos, una niña de unos diez o doce años arrojó delante de mí un papel arrugado al hueco que dejaba la persiana a medio bajar de un comercio sin que la que supongo que sería su hermana mayor, por el parecido, le dijese absolutamente nada, y me jode porque sus padres deben ser más o menos de mi quinta y los suyos a su vez de la quinta de los míos, y esa no es la educación que yo recibí en su día. Obviamente marranos han existido en todas las épocas. En fin, buena entrada y feliz año nuevo. Un abrazo.

Paco Muñoz dijo...

Muchas gracias Rfahell, coincido plenamente contigo, a mi me obligaban a cumplir los precectos que, además son fenomenales, mi madre tenía el Librito de la Urbanidad, y auqnue lo que en el ponía respecto a los formalismos en el comedor, que no se podían tener en casas de pobres, los que se podían se cumplian. El dejar asientos en el bus a los mayores, dejarles la acera a pesar de tener tú el derecho por ese código no escrito de la derecha del sentido de la marcha. Los papeles en las papeleras y no tirar nada al suelo, ni las cascaras de pipas o altramuces. Pero se tira la basura fuera de horario, y en contenedores distintos, normalmente por la mañana que condena a malos olores a vecinos cercanos todo el día, y a no poder limpiar el contenedor los trabajadores al uso. Muchas más educación. Un abrazo