lunes, 18 de agosto de 2025

MEZQUITA-CATEDRAL DE CÓRDOBA: IDENTIDAD Y MODERNIDAD MANUEL HARAZEM

Manuel Figueroa León (Harazem)

Repasando los archivos en el ordenador, veo uno de diciembre de 2014 -van a hacer once años-, que recogía un artículo sobre el encuentro el 29 de septiembre del mismo año, en la Biblioteca Central entre Manolo Figueroa (Harazem) y la profesora de Filosofía Hedwig Marzolf. El debate trataba sobre la Mezquita. Lo he vuelto a releer y a recordar pues estuve en él, y lo primero que me ha llamado la atención es el tiempo transcurrido, casi once años, después la categoría de Manolo con su ácida e incisiva pluma, siempre era una delicia leerlo. La mayoría de las veces me dio el volunto de recopilar todas esas palabras inventadas por él, y publicarlas. Todavía no sabía que el destino tenía preparada su marcha de este mundo unos años –pocos- después. Su horizonte fisiológico, por lógica, estaba en ese momento muy lejano, pero lamentablemente no fue así. Para mi gusto Manolo era infinitamente mejor con la pluma que con la palabra, así se lo comenté cuando cambié impresiones del debate con él. Transcribo el texto de su trabajo posterior al acto y algunas fotografías. Es extenso pero uno se alegra cuando lo lee.

Cartel del evento

MEZQUITA-CATEDRAL DE CÓRDOBA: IDENTIDAD Y MODERNIDAD MANUEL HARAZEM

"Hace poco tuve la suerte y la oportunidad de participar en un minicoloquio celebrado en la Biblioteca Central de Córdoba con motivo de la presentación del segundo volumen del número 2 de la Revista REBEL-ARTE que editan Las Mesas de Convergencia de Córdoba como contertulio de la profesora de filosofía Hedwig Marzolf. Ambos teníamos que defender nuestros puntos de vista desarrollados formalmente en los artículos que nos había publicado la revista. Hedwig lo hizo sobre su visión de la Mezquita como símbolo de modernidad mientras yo tenía que jugar con mi visión de la identidad de la misma y de paso de la identidad de la cultura española y la de nuestra ciudad en particular. Todo ello sumamente condensado dado el escaso tiempo del que disponíamos. No pudo ser en la medida que ambos temas se merecían. Por eso ahora, que no tengo limitación de espacio o de tiempo más que la que le impongan a quien por aquí aparezca su propio interés o su paciencia, voy a tratar de explicarme lo largo y tendido que haga falta.

Harazem

La muy interesante visión sobre la identidad de la Mezquita-Catedral de Córdoba de Hedwig y la mía son completamente opuestas, aunque curiosamente coincidan en su condensación en un mismo término, el de modernidad. Para ella la Mezquita es moderna porque representa la fusión física de un templo católico y uno islámico y la espiritual del reciclaje de fe y razón que, según ella, es la base de la Ilustración, lo que conectaría ese proceso con el avance moral que supone que lo diferente se guarde mutuamente el debido respeto. Para mí, por el contrario, la modernidad que pueda definir a la Mezquita-Catedral de Córdoba es la que apela al sentido estrictamente historiográfico del término. O sea, la que considera que su estado actual, una mezquita con una catedral incrustada en su centro, fue fruto de un acto de modernidad, uno de los muchos actos inaugurales con que la nueva España violentamente unificada celebró su entrada en la Edad Moderna

La filósofa

Algunos de esos actos fueron la conquista a sangre y fuego de dos reinos soberanos, Navarra y Granada, los primeros intentos de obligar a la conversión a los musulmanes, la quema de la inmensa mayoría de los libros de la Madraza de Granada, la universidad del último reino de Al Andalus y como correlato la fundación de otra, la de Alcalá, de la que quedaban estrictamente excluidos la cultura de los otros grupos étnicos del nuevo reino unificado y los saberes que pudieran entrar en conflicto con la ultraortodoxia católica que administraba la Iglesia, la constitución de la Inquisición como primera maquinaria totalitaria moderna para vigilar precisamente esa pureza ideológica... Dejo adrede la expulsión de los judíos para el final porque me va a servir para jugar con una preciosa pero muy siniestra simetría que pespuntea la historia de la ideología que amparaba todas esas barbaridades, cuyos efectos sufrimos aún hoy día y más persistente y penetrantemente de lo que normalmente pensamos: el nacionalcatolicismo.

La mesa

Contra lo que piensa mucha gente el nacionalcatolicismo no nace con los Reyes Católicos, sino con los visigodos. El nacionalcatolicismo es pues una ideología milenaria. Se basa en la defensa de la unidad indisoluble de la monarquía hispana y el catolicismo, de los reyes y los obispos, del trono y el altar, y la uniformidad obligatoria de fe y de pensamiento para todos los súbditos, que cursa con el arrancamiento violento del que se considera solar patrio y patrimonial monarcoeclesiástico de cualquier diferencia que entre individuos o colectivos se encontrare. La Iglesia Católica arrastraba ya una larga tradición de intentos y triunfos de ese tipo desde que en el Concilio de Nicea nuestro paisano Osio clavara al solar del imperio los dogmas del catolicismo e inventara la misoginia, la judeofobia y la persecución religiosa como materias legislables: judíos, paganos y herejes fueron martirizados de manera tan masiva que multiplicaron en pocos años por varias decenas el número de los cristianos que el estado romano ejecutó en toda su historia por causas estrictamente políticas.

El presentador

No tenía que haber sido condición indispensable pero su germen está en la unificación de la península ibérica bajo un mismo poder por una monarquía de origen germánico recién convertida al catolicismo y cuyos reyes se suceden no por vía hereditaria sino electiva. Esa electividad pasó de ser originalmente ejercida por asambleas de guerreros a serlo por los obispos, de manera que la elección de un rey visigodo se decidía en un concilio, normalmente el que se celebrara periódicamente en Toledo. Además de elegir rey cuando tocara en esos concilios no sólo de debatían temas doctrinales y eclesiásticos sino que de ellos emanaban las leyes que regían el estado.

Otro plano de la Dra.

Parece ser, porque se trata de un tiempo muy oscuro, que mientras fue oficialmente arriano el estado visigodo no obligó a la mayoría católica hispanorromana a convertirse a su fe ni alimentó las legislaciones antijudías previas que heredó del Bajo Imperio de raíz católica. Fue tras la conversión de sus élites al catolicismo por la cada vez más acuciante presión de los obispos, que pastoreaban a un pueblo mayoritariamente católico, cuando el estado visigodo asumió los presupuestos de tolerancia cero que siempre fueron, y lo son hasta nuestros días, la marca más característica del catolicismo. Se persiguió entonces a muerte a los arrianos y se volvió al antijudaísmo institucional que fundara Osio. Una de las últimas leyes que el concilio de Toledo promulgó fue el colofón de otras muchas que contra los judíos se habían allí promulgado a lo largo del siglo VI.

Manolo en el ejercicio de la palabra

EL PARÉNTESIS ANDALUSÍ

La simetría de la que antes hablaba es escalofriante. El mismo año de 711 en que los primeras efectivos del ejército omeya desbaratan el putrefacto estado nacionalcatólico visigodo empezaba a hacerse verdaderamente efectivo el terrible decreto que firmase el rey Egica en 694, promovido por los obispos católicos y sancionado por ellos en el XVII Concilio de Toledo, que mandaba la confiscación de todos los bienes de los judíos (conversos obligatorios ya la inmensa mayoría), su esclavitud perpetua y la disgregación de sus familias. A punto estuvo de cumplirse el sueño, largamente postergado por la propia dinámica social y por la roqueña resistencia de las comunidades judías, de los Padres de Nicea de eliminar violentamente de la Hispania católica cualquier rastro de otra fe.

Su avatar

La salvación les vino de mano de los ejércitos omeyas y de la nueva administración que en la península se instauraba. Y esa salvación funcionó como un paréntesis de ocho siglos justos. El mismo año en que el último bastión de ese Al Andalus que salvó a los judíos peninsulares del exterminio caía en manos de la monarquía castellano-aragonesa se restaura el nacionalcatolicismo como doctrina de estado y se decreta la expulsión de los mismos. Ni diseñado por un delirante novelista de historia ficción. 
El fin violento de Al Andalus supuso el cierre de ese paréntesis en el que con las trancas y barrancas y con los huecos temporales que se quiera la convivencia entre los miembros de las tres religiones había sido una realidad constatable. Y no sólo en el territorio físico de Al Andalus, sino que en los territorios que los católicos le iban arrebatando, a pesar de que la conquista había tomado desde el siglo XIII un cariz de Cruzada, se contaminaban del espíritu de tolerancia que, incluso en épocas de guerra solía ser en él lo habitual. Lo que Márquez Villanueva llamó el concepto cultural alfonsí.

Otra vista del avatar

El término convivencia, pero sobre todo el de tolerancia, provocan bastante preventivo repelús a los historiadores más competentes porque consideran que atienden a conceptos estrictamente contemporáneos y como ha explicado pertinentemente en un revelador e imprescindible trabajo Eduardo Manzano son conceptos políticos que atienden más a intentos de influir en el transcurrir del momento actual que al afán de conocimiento disciplinar del pasado (1). Estando de acuerdo al cien por cien con esa idea considero no obstante que de cara a la interpretación global de largos recorridos históricos y en términos estrictamente comparativos de unos periodos y otros pueden ser útiles, tanto porque puestos de acuerdo en la fijación de sus limitaciones pueden ilustrar tendencias y explicar evoluciones como porque realmente no contamos con otros para hacerlo. De todas formas a mí me parece muy pertinente el uso del término tolerancia aplicado a ciertas realidades históricas tal como el otro día lo definió el poeta sirio Adonis enfrentándolo al de igualdad: la tolerancia esconde un aspecto racista: yo te tolero porque tengo la verdad y te dejo hablar. Y en nuestro caso perfectamente adecuado para definir las relaciones de poder entre religiones que se establecieron a lo largo de toda la Edad Media en la península Ibérica. Desde luego siempre será preferible el racismo tolerante al exterminante. 

Paseo sobre la memoria histórica

Parece como si el catolicismo guerrero triunfante hubiera esperado a matar al último incómodo testigo de esa época para hacer tabula rasa de todo su espíritu. Inquisición, limpieza étnica, quema de libros y de herejes, intolerancia ideológica y religiosa, estatutos de pureza de sangre… Todo lo que no se atenga a la dogmática católica romana, en un momento en que en Europa se están ensayando espiritualidades y acomodos ideológicos más acordes con sus más abiertas sociedades, en la nueva España se extirpa violentamente. España se cierra a cal y canto al pensamiento, a la ciencia y a la diversidad ya para siempre, se convierte en un baúl de apolillados harapos, aire viciado y rancio y tufo a guardado hasta nuestros propios días, en que hemos podido disfrutar de una pequeña abertura por la que ha entrado algo de luz y aire, pero tamizados por la atroz herencia y la santa tradición intransigente, de claridad y contenido de oxígeno insuficientes. Todo ese cocimiento rompe a hervir en unos pocos años del primer cuarto del siglo XVI a partir exactamente de la fecha en que muere definitivamente Al Andalus como poder político, que como entidad cultural malvivirá medio siglo más aún en situación muy precaria, clandestinamente, hasta que se expulse definitivamente a sus portadores: los moriscos.

Parte de su legado literario

LA MEZQUITA


Y es en esa tesitura de extirpación y tabula rasa cultural cuando se construye una catedral renacentista en el corazón de la Mezquita. Y es en ella y desde ese punto de vista donde hay que enmarcar la interpretación simbólica, la identidad ideológica de esa supuesta armoniosa hibridación arquitectónica que se presenta así a la luz de ese foco más como una violación y un acto de humillación y dominio por parte de quien no había podido eliminar los elementos originales que le recordaban a un tiempo y un ámbito en el que tuvieron que compartir tolerantemente espacio físico e ideológico con sus adversarios ideológicos. 
La historia de los intentos de destrucción de la Mezquita de Córdoba por parte de los obispos que recalaban en su diócesis y para la que a veces incluso se toparon con la resistencia de parte del propio cabildo catedralicio y siempre con la del municipal es conocida. Y fue esa resistencia la que llevó a los reyes a impedírselo en varias ocasiones, permitiéndoles hacer sólo las reforma mínimas y estrictamente necesarias que permitieran el culto católico. Fernando III, su hijo Alfonso X, quien reguló exactamente las tareas de mantenimiento del edificio e Isabel de Castilla que negó el permiso al obispo Manrique (Iñigo) para destruir parcial o totalmente el oratorio islámico para construir una catedral y sólo le permitió derribar un número limitado de naves omeyas para construir una gótica (1489).

La Mezquita

Hasta entonces los propios reyes y las autoridades civiles locales eran conscientes del inconmensurable valor arquitectónico y artístico del monumento. Por eso quienes hablan de que la catedral se construyó finalmente de acuerdo con los criterios conservacionistas de la época no están, por usar una expresión tibia, usando correctamente los datos documentales existentes. Todo apunta a que los obispos querían una catedral como aquellas de las que gozaban lo demás obispos, y no algo que sentían que al ser otra cosa, algo que podía ser interpretado desde fuera de su doctrina, un monumento artístico persé, desligado del culto católico estricto, podía desvirtuar lo único importante para ellos: la extensión de sus dogmas religiosos para dominar las conciencias. Las grandes mezquitas de Sevilla y Granada fueron demolidas. Para la de Sevilla, según sospecha el profesor Almagro, tuvieron que falsear el informe sobre su real estado para justificarlo, y acompaña esa sospecha con documentación que parece apuntar a que estaba proyectada incluso la demolición de la propia Giralda.

Desde el sur

La de Córdoba tuvo mejor suerte, probablemente porque su sobrecogedora belleza no solo debía superar a la de sus hermanas, sino que debía sobrepasar cualquier otra consideración en el ánimo de cualquiera que no fuera un obispo, exactamente como ahora, y cuando por fin otro obispo, también Manrique (Alonso), decidió pasar por encima del sentimiento y del sentido común de los súbditos del rey y destruir el corazón de la mezquita para construir una desproporcionada catedral en el mismo, las resistencias para impedirlo, del cabildo municipal y de parte del catedralicio, aunadas en torno a la figura del corregidor Luis de la Cerda, con que se encontró fueron numantinas, con condenas de muerte y amenazas de excomunión mediantes. Pero súbditos todos al fin del rey, se hizo su voluntad, una voluntad mediatizada por el miedo cerval del monarca al poder mágico de los administradores de las condenaciones eternas.

El Patio de los Naranjos

Sin embargo no todos los investigadores opinan así. El profesor Urquízar considera que es mucho más probable que la resistencia de los caballeros veinticuatro a la modificación del espacio se debiese al temor a perder los privilegios y los enterramientos que sus familias habían adquirido en él (2). Es probable que pesara esa circunstancia, pero desde luego las alegaciones que hace el cabildo municipal contra la destrucción de la fábrica islámica son claras y atienden a criterios estrictamente estéticos, de una impecable índole conservacionista, que podría firmar hoy cualquier técnico de conservación de patrimonio del estado, considerándola un gravísimo atentado bajo el acerado argumento de que tal como estaba edificado era único en el mundo, y la obra que se dehace es de calidad que no podría volver a hacer en la bondad y perfectión de que está hecha (3). Curiosamente, podría decirse que el cabildo municipal representa los valores inclusivos que se fueron fraguando a lo largo de toda la Edad Media y el obispo los de la modernidad, que en España comienza con el triunfo del absolutismo nacionalcatólico, con el triunfo de los valores excluyentistas. 
Por otra parte podría utilizarse legítimamente como prueba de que la Mezquita no perteneció nunca a la Iglesia Católica, sino a la corona, cuyo exclusivo heredero actual es la soberanía popular, ese hecho de que los obispos tuvieran que solicitar permiso real para ejecutar cualquier modificación en el templo. Y desde luego resulta mucho más contundente como prueba que la que ella propone del ritual mágico del báculo y la ceniza con que se apropiaron de él.

Escaparate de la antigua Luque

Esa apropiación consciente del mayor espacio posible en el interior de la Mezquita, a la que se irá sumando los dos siglos siguientes la colonización de sus muros internos por decenas de siniestras capillas barrocas y rococós, principalmente funerarias, se puede considerar el símbolo perfecto de la instauración del nuevo paradigma, el paradigma de los Reyes Católicos en sustitución del fenecido de muerte violenta paradigma de Al Andalus. Es decir, la construcción de la enorme catedral renacentista forma parte de la misma conflagración teórico-práctica de la tabula rasa nacionalcatólica que la conquista de Granada, la quema de la biblioteca de la Madraza, la expulsión de los judíos, la obligación de conversión a los moriscos y su posterior expulsión, la prohibición del uso de otras lenguas, el árabe y el hebreo, la anatemización de la ciencia, la instauración de los estatutos de limpieza de sangre, los procesos inquisitoriales contra los humanistas… En definitiva una muy visible consecuencia más del triunfo definitivo en la lucha que la casta católica venía librando desde el siglo XIII para sobrevivir frente a las culturas hispanojudía e hispanoárabe, muy superiores en lo científico, literario y filosófico (4), pero a las que hasta entonces no habían hecho ascos para enriquecer la cultura propia.

Presentación de su libro la Odisea de los Rabadies 

La identidad española deviene entonces régimen inquisitorial de vigilancia y terrorismo de Estado. Se trató de acabar por decreto con una identidad híbrida, enriquecedora, forjada lenta, amorosamente a lo largo de varios siglos y que produjo frutos tal geniales como la literatura castellana bajomedieval y el mudéjar y sustituirla por la fuerza por una nueva inventada, en la que se han eliminado cuidadosamente todos los elementos que se consideran impuros, de la misma manera que Antonio de Nebrija, que no por casualidad escribe en el mismo crucial año 1492 la primera gramática de la lengua castellana, se emplea en la tarea de eliminar de su diccionario palabras árabes, impuras, algo que no pudo conseguir totalmente porque la hubiera convertido en una lengua irreconocible. 
De alguna manera la redacción de la gramática castellana de Nebrija puede servirnos como ejemplo para entender lo que ocurrió con la Mezquita de Córdoba: la idea que mueve a los reformadores en ambos casos es la de purificación, la erradicación de los elementos impuros, las palabras árabes de la lengua y las formas islámicas del oratorio. Tareas finalmente cometidas sólo a medias por la resistencia de la propia lengua en el primer caso y del pueblo cordobés en el otro.

Público asistente

De la extirpación de todo lo que supuso lo incluido en el paradigma vigente en toda la Edad Media, de la integración y el progreso, lo que en nuestros días ha dado en llamarse el paradigma de Córdoba, pero que yo prefiero llamar de Al Andalus, la convivencialidad, o más bien la hospitalidad, la riqueza intelectual y científica, la curiosidad gnoseológica, los elementos del que fue primer renacimiento europeo y sobre cuyas bases se funda el segundo y definitivo, sólo quedará un enorme agujero vacío y sólo en los bordes de la herida, aún a medio cauterizar, convenientemente clandestinizados o travestidos, será posible encontrar jirones sueltos de esa memoria arrancada violentamente. Cervantes o los místicos, por ejemplo. Para cubrir ese vacío, el vacío que dejan la desertización cultural y los genocidios perpetrados por el estado y la iglesia (el nacionalcatolicismo renacido) aparecerá el barroco, el espectáculo huero, el trampantojo, la cultura desustanciada, la nada tintada de purpurina que tapa un agujero lleno de sangre aún fresca. No hace falta que ahonde. Quien quiera entender cómo funcionan ese tipo de fenómenos más fácilmente tiene un trasunto más reciente con mirar atrás sólo 35 años: la llamada Movida como artefacto neobarroco diseñado para ocultar el paredón agujereado y salpicado de sangre seca del genocidio franquista para que los asesinos no se vieran permanentemente expuestos a su recuerdo. En España siempre es igual. Por usted no pasan los años, señora, que dejara escrito Larra.

Manolo en el patio del Juan XXIII

EL MITO DE AL ANDALUS

Es esa condición de paréntesis de convivencia más o menos relajada entre dos monstruosos intentos de creación de un monolitismo doctrinal de estado a base de sangre y fuego el que alimenta el mito de Al Andalus. Los mitos –nos recuerda González Alcantud- no son verdaderos ni falsos. Nos consuelan y nos ayudan a pensar el tiempo con sus conflictos y quietudes. No tienen una moral preestablecida. Pero teleológicamente pueden orientar el pensamiento y la acción hacia el bien o hacia el mal (5). Así, el mito de Al Andalus está traspasado, como todos los mitos, por las inquietudes éticas del momento en que se usa, y en este momento se alza como un mito necesario, bueno para pensar, en el sentido que da a esa expresión Levy Strauss, por su bondad moral.

En una manifestación

Su construcción no fue producto de las delirantes mentes de unos románticos orientalistas sino fruto de la necesidad que asaltó a la historiografía española del siglo XIX, la que había sido capaz de entroncar con las corrientes ilustradas europeas, de buscar una referencia comparativa equivalente que ayudase a comprender la verdadera naturaleza monstruosa y el indescriptible horror de la instauración desde la bisagra de la modernidad del paradigma totalitario nacionalcatólico: el principio férreo de negación absoluta de cualquier otredad, por nimia que fuera, que raspara tan siquiera las verdades impuestas por una estrechísima ortodoxia y vigilada por la maquinaria ideológico-represiva de la Inquisición y ejecutada a sangre y fuego. Frente a esta visión el mito de una edad de oro en que la convivencia de ideas diferentes y la hibridación intelectual eran posibles resplandece e ilumina de paso la brutal diferencia. No es extraño que la Iglesia Católica luche con todas sus fuerzas y medios contra la extensión del mito, porque es la primera perjudicada por la comparación de las cualidades éticas de sus actuaciones en relación a las que el mito refiere.

Manolo Harazem

Es perfectamente coherente con ese lógico rencor que la Iglesia Católica guarda a todo lo que huela al mito bueno de la convivencia de Al Andalus que en el folleto que el cabildo proporciona a los visitantes con las explicaciones sobre el monumento, aparte de mutilar su nombre eliminando el término Mezquita, de minimizar su carácter y el genio constructivo islámico original y de convertirlo en un panfleto catecismal, dedique uno de los siete renglones de la condensada explicación de la parte de la ampliación de Abderraman II a incidir en las persecuciones que en ese tiempo se infligieron a los cristianos para demostrar que el mito de la convivencia es falso. Cuando precisamente lo que demuestra esa convivencia es el hecho de que esos individuos, verdaderos terroristas suicidas, tuvieran que echar mano a la provocación a la ley vigente quebrantándola gravemente, injuriando los preceptos religiosos de la religión del estado y de la mayoría de la población para forzar su ejecución y tratar precisamente de violentar la tolerancia.

(1) Eduardo Manzano: "Algunas reflexiones críticas sobre el Califato de Córdoba y el mito de la convivencia". Awraq: Estudios sobre el mundo árabe e islámico contemporáneo, ISSN 0214-834X, Nº 7, 2013, págs. 225-246.
(2) Antonio Urquízar Herrera “El Renacimiento en la periferia”. Córdoba, Universidad de Córdoba, 2001. (Pag. 194).
(3) Rafael Ramírez de Arellano: "Inventario monumental y artístico de la provincia de Córdoba", Servicio de Publicaciones de la Excma. Diputación de Córdoba, 1983 (1ª de 1904), Apéndice A, copia de una página del Libro capitular del Ayuntamiento correspondiente a 1523.)
(4)  Eduardo Subirats "Memoria y exilio". Losada, Oviedo 2003 pg. 50
(5) González Alcantud "El mito de Al Andalus". Almuzara, 2014, pg. 19

Córdoba, diciembre de 2014"

Fotografias del autor y otras sin autor conocido
Bibliografia texto de Manuel Harazem

sábado, 9 de agosto de 2025

INCENDIO EN LA MEZQUITA CATEDRAL DE CÓRDOBA

Fotografía de El País

Ayer 8 de agosto por la tarde se declaró un incendio en el muro este de la Mezquita de Córdoba, entre capillas católicas de ese muro de la ampliación de Almanzor hay un almacén que lo configura lo que fue una capilla y la Puerta de San Nicolás. Allí guardan sillas para los eventos culturales y las barredoras eléctricas del servicio de limpieza, entre otros útiles. Hoy 9 de agosto es el aniversario del asesinato por los americanos USA, de miles de japoneses inocentes en Nagasaki. Siempre los mismos, igual que en Gaza.

               
Desde el muro de Almanzor al fondo los restos

Parece ser (cuando estudien lo ocurrido lo centraran más),
que una de las barredoras estaba en carga de su batería para el trabajo de hoy sábado, y por razones desconocidas se prendió. Las llamas con el combustible que había en el almacén -sillas de madera-, llegaron hasta la techumbre que es de cañizo y salieron a la calle como puede verse en la mayoría de las fotografías y vídeos publicados que han sido muchos. Los techos colapsaron.

Fachada oriental

La TV catalana lo ha retransmitido en directo, pero para Canal Sur era más importante la corrida de Marbella, donde citaban en ese mismo momento la presencia del Sr. del Val (enchufado en un burladero de la barrera), esposo de la presentadora Sra. Roca (no sé cuál es su ocupación laboral), aparte de la de marido de… como “personalidad” asistente. 

Personal en Santa Catalina

Afortunadamente el servicio contraincendios funcionó, además de que el personal estaba preparando la visita pedagógica nocturna que fue suspendida inmediatamente. Y las tres dotaciones de bomberos cordobeses, notables profesionales, actuaron con la diligencia que les honra y consiguieron en hora y media controlarlo. 

La ampliación de Almanzor en el patio

Hoy está acotada toda la ampliación de Almanzor, hasta en el Patio de los Naranjos. Están cerradas al público las Puertas del Caño Gordo y de la Grada Redonda, así como la de Santa Catalina. El personal de bomberos y mantenimiento sigue trabajando desescombrando enyesados de paredes dañado y paramentos. Valorar el daño al patrimonio lo deberán estimar los técnicos en la materia, pero a simple vista no ha sido lo que pudo ser. 

Desde Corregidor Luis de la Cerda (Foto del Mundo)

Esas capillas han sido remozadas hace poco tiempo, no sé si exactamente las afectadas. El hueco del almacén creo es el correspondiente a la Puerta de San Nicolás, s.e.ú o. mío, y las capillas cercanas a ambos lados son la de Ntra. Sra. de la O y la del Espíritu Santo. La página del Cabildo no las señala en sus noticias. Debemos alegrarnos por la solución rápida, no como otros energúmenos ultras que no se alegran.

Fotografías del autor, prensa nacional y local




miércoles, 9 de julio de 2025

DUDAS SIN DUDA

 
Los dos establecimientos

Como consecuencia del proceso de rehabilitación al que voy todas las mañanas, -consecuencia del atropello que sufrí en marzo, por parte de una persona que no me vio intentar cruzar por un paso de peatones-, paso un rato por el centro de la ciudad, donde se ubica el gabinete de fisioterapia. Ese tiempo de espera y aprovechando el limitado frescor de estos amaneceres (son las siete y media de la mañana) me sirve para repasar la memoria. En la calle Victoriano Rivera (Nadie sabe que se llama así o muy poca gente) conocida por calle La Plata, me encuentro con dos establecimientos que tienen el mismo nombre -ignoro si serán del mismo propietario-, la antigua marisquería El Puerto, donde podía verse muchos días el sombrero característico del Pipo, apoderado de Manuel Benítez cuando dejó de ser El Renco, para ser El Cordobés

Un cartel

Unos carteles en las cristaleras que se prestan a dudas, pero otros aditamentos carteleros como dos banderas de España y tres estampitas religiosas católicas, confirman el sin duda del título. Dos señores con cara de perro uno con corbata roja y otro con corbata azul, y la leyenda “Mismo perro distinto collar”, señalan quiero entender al bipartidismo. Otro cartel que dice: “Elecciones: F1-Pantomima. Celebrada cada cuatro años para legitimar de forma fraudulenta el régimen autoritario en el que vivimos. Tendido 7”, y el más dudoso, el instrumento de Monsieur Guillotin, con la leyenda: “Quizás haya llegado el momento de que sea el pueblo el que comience a hacer recortes”. El primero nos puede servir a todos, el segundo no lo permitiría el fascismo, y el tercero es evidentemente revolucionario. Arriba tres estampas de catolicismo puro.

Otros carteles

En otro escaparate dice: “¡Despierta!*La democracia no existe. *Las elecciones están manipuladas.*Los grandes fondos controlan los gobiernos. *Los políticos marionetas ¿Qué puedo hacer? Paga siempre en efectivo”. Y una lista de pegatinas de tarjetas bancarias. Critica el dinero de plástico y dicen que la democracia no existe, si no existiera no podrían poner este tipo de carteles sediciosos, estarían cerrados por los fascistas. Y en otro dice: “Los mayas cada vez que ocurría una epidemia o catástrofe sacrificaban a los dirigentes políticos como ofrenda a los dioses. Este establecimiento se rige por el ‘Comité de expertos’ del gobierno de España. Definición de OMS. Organización de Mamporreros Satánicos. Cuánto más corrupto es el país, más leyes tiene. Tácito. ¡Tiranía Mundial! Dame una caja de PCR y dime dónde quieres que un rebrote y así de fácil impone una cuarentena a un barrio, una ciudad, una provincia, un país, o al mundo entero. El tiempo que quieran, cuando quieran. Los pensamientos son libres, Córdoba 16 de mayo de 2020, -Pedro Varela”.

Otro

Como se ve negacionismos a ultranza y crítica a las medidas de sanidad en epidemias del gobierno durante la pandemia. Y ¿quiénes criticaban estas medidas? No es necesario señalar, está meridianamente claro. Todo ello enmarca a un títere con mascarilla. Y no nos olvidemos las dos banderas patrias que custodian el nombre comercial. Dos bonitas fotografías antiguas, una de la calle de la Plata y otra del establecimiento que se llamaba Negresco. No hay dudas, por si las generaban algunos carteles de los señalados. De revolucionarios poco, pero que cada uno se haga su composición de lugar. Aunque se presten a error. También lo hacían los programas electorales de partidos de derechas y fascistas, que los escuchabas en los espacios gratuitos televisivos electorales, y creías estar escuchando al Che Guevara. El nacional catolicismo parecía anticapitalista, y el nacional socialismo era fascismo puro.

Fotografías del autor
Bibliografía cartelera


domingo, 15 de junio de 2025

DÍA ANDALUZ DE RECUERDO Y HOMENAJE A LAS VÍCTIMAS DEL GOLPE MILITAR Y LA DICTADURA

Cartel del Acto.

El sábado estuve en el acto de homenaje a las víctimas de la represión fascista, el título completo oficial es: “Día Andaluz de recuerdo y homenaje a las víctimas del golpe militar y la dictadura”, que se celebró en el Cementerio de la Salud, junto a la puerta falsa, y cerca de las zonas de las fosas donde aún continúan sin exhumar muchos restos de personas asesinadas por el fascismo que ahora renace y lamentablemente entre la juventud. Tuve la impresión, contrastada después en la calle con otras personas anónimas, que el acto lo protagonizaron las instituciones, que tienen la obligación de colaborar en la reparación, y las víctimas quedaron en un plano inferior.

Palabra de la organización

Escuchaba al concejal del PP y esperaba que al final se despidiera después de las promesas de apoyo, con un Salud y República. Me llamaba la atención que manifestara el deseo de su partido de colaborar cuando en la mayoría de las comunidades que gobiernan con los ultras, están derogando las leyes de memoria, y recordaba lo que el notario M punto Rajoy dijo en una entrevista, que él no había dotado ni un euro para la Ley de la Memoria Histórica de Zapatero. Vivir para ver y esperemos equivocarnos.

Banderas republicanas

Las restantes intervenciones por el estilo. La más sincera me pareció la del Defensor del Pueblo Andaluz, porque la del Secretario de Estado, te obligaba a preguntarte que ha hecho su partido cuando tuvieron mayoría absoluta para reparar, hacer una ley descafeinada, y ahora se erigen en protagonistas, cuando los verdaderos son los familiares de los asesinados que, sin su esfuerzo continuado, hubieran seguido sin hacer nada. Llegas a la conclusión que cuando toman el protagonismo los profesionales de las instituciones siempre ocurre lo mismo. Vi mucha infantería socialista pero apenas nadie de la izquierda de esta ciudad, no la apellido verdadera porque también tengo algunas dudas. 

Panel de las víctimas sin público

La del Rector de la universidad medida y didáctica, justificando la labor de la Cátedra de la Memoria. Luego cuatro emotivas intervenciones de los verdaderos protagonistas, los familiares. Una señora casi justifica a un familiar asesinado de ser político, fruto de que ese terror o control del relato continúa implantado y hace mella aún en las personas. “No sabíamos que estuviera en política pero a lo mejor estaba” y por eso su detención. Entre los asistentes caras conocidas de estar siempre al pie del cañón, luchadores armados  de la pluma e investigación, o simplemente portadores de una bandera republicana. U otros, como yo, que sólo hacemos bulto. 

Ofrenda floral

Tuve la satisfacción de ver a amigos y amigas que hacía meses no veía, y me eso me sirvió mucho. Hace casi tres meses, desde el atropello sufrido, que no asisto a ningún acto. Decir que este año se han incorporado al homenaje las victimas de los pueblos de la provincia. La ofrenda floral muy emotiva, como siempre, que demuestra constantemente la absoluta falta de rencor por parte de los afectados. 

Coro Averroes ensayando al princpio

El coro Averroes que amenizó el comienzo y cierre del acto cumplió con creces. Lo importante es que sigan aportando los fondos necesarios las instituciones obligadas a ello, para que no haya una sola familia sin recuperar los restos de sus familiares asesinados por la barbarie fascista, y se cierre de una vez este capítulo que como gane la ultraderecha volverá seguro al punto de partida. 

Fotografías del autor

sábado, 14 de junio de 2025

A PERPETUIDAD

Mausoleo de la familia Castillejo Gorraiz

“Como te ves, yo me vi; / como me ves, te verás. / Todo para en esto aquí. / Piénsalo y no pecarás“.

Fue lo primero que se me ocurrió al ver el mausoleo de la familia Castillejo Gorraiz, mientras esperaba el acto homenaje a los represaliados por el fascismo hoy catorce de junio. Que sí, que mis padres están en un modesto columbario de la familia junto con mis abuelos y en la lápida para justificar pone familia Muñoz-Carreras y no tiene el mismo boato, pero mis padres han sido buenas personas, mi abuelo sólo un poco flamenco, para argumentar la diferencia del cordobés antiguo.

Padres y hermana

Ya no importan aquellas exageradas pólizas de retiro, para sus señoras hermanas, a perpetuidad, que tanto nos escandalizaron, pero la verdadera perpetuidad viene cuando tallan tu nombre y una fecha en el granito de un mausoleo. Los habitantes de S. Florencio, 33, que es la dirección, son: Doña Severa Gorraiz Cuenca, 1952; D. Miguel Castillejo Cubero, 1955; Doña Purificación Castillejo Gorraiz, 2014; Doña Carmen Castillejo Gorraiz, 2015; Doña Dolores Castillejo Gorraiz, 2018; y D. Miguel Castillejo Gorraiz 2014. Hace siete años no se abre el mausoleo, la última apertura fue para la entrada de Doña Dolores, y salvo alguna presunta paternidad reclamada judicialmente, que pudiera ser, ya no se abrirá nunca, por lo que la perpetuidad es manifiesta. Es curioso como el tiempo nos coloca en el lugar adecuado. No sirven de nada los rimbombantes títulos, las pensiones cuantiosas, el peloteo de los aduladores, que quedaron huérfanos de padre. Sólo un nombre y apellidos tallados en un noble granito, y los títulos: 

Hermanas

-Prelado de su Santidad.
-Canónigo penitenciario (no piensen otra cosa, “es el que se ocupa de administrar el sacramento de la penitencia para algunos pecados cuya absolución está reservada. Es prebendado de oficio. Es también el confesor propio del cabildo”.) de la SIC de Córdoba.
-Canónigo honorario de la Catedral de Sevilla.
-Creador de la empresa Cajasur.

Pienso que debería poner además:
-Presunto culpable de la desaparición de la Caja Provincial de Ahorros de Córdoba.
y –Presunto culpable de la desaparición de la Empresa Cajasur.

Los títulos y la heraldica episcopal

De la rendición verdadera de cuentas a su penitenciario jefe Supremo nunca lo sabremos. Al final sólo se quedará en el pensamiento, lo que dice la inscripción que hay en la Cruz Humilladero a la memoria de Federico Martel de Bernuy, conde de Torres-Cabrera y del menado, debajo de la hornacina en las Ermitas de Córdoba: 

“Como te ves, yo me vi; / como me ves, te verás. / Todo para en esto aquí. / Piénsalo y no pecarás“. 

A perpetuidad.

Fotografías del autor
Bibliografía de Internet

viernes, 30 de mayo de 2025

LA MALA FOLLÁ GRANADINA



“/Dale limosna mujer,/ 
que no hay en la vida nada, /
como la pena de ser, /
ciego en Granada”/

Creo que estos versos de Francisco de Icaza, poeta mexicano, que yo recuerdo desde la primera vez que visité la Alhambra y subí a la Torre de la Vela, encierran toda la belleza de esta ciudad que embruja siempre. Corría el 1953, nosotros; mis padres, mi hermana y yo vivíamos en Pinos Puente. Antes en 1951 habíamos estado otra vez, pero vivimos en una calle del centro del pueblo, la segunda lo fue en la calle Barrionuevo, junto a la acequia. En una casa similar y al lado de la nuestra vivía un sombrerero, al que veía convertir trozos de fieltro en sombreros hechos y derechos. El calor de las planchas, los moldes, y a pesar de querer colaborar, la “mala follá” del artesano, formaba parte del conjunto. 

Calle Barrionuevo Pinos Puente

Al fondo de la calle se veía el cono del Piorno, en Sierra Elvira, donde mi padre me contaba había tirado de niño los aros metálicos de jugar, por las profundas simas del monte, y lo que tardaba en parar de oírse los rebotes en las piedras, que denotaban la profundidad de la sima. Sima Santa se llamaba una. Nunca subí al Piorno pero formaba parte del Sky Line de la calle de la Barrionuevo, donde estaba la tahona de mi abuelo primero y mi tío Antonio después, ahora también de mi padre que iba a intentar colaborar en el resurgimiento de la empresa, si ello fuese posible. 

Mari Estrella y quien suscribe, 1951

A mí me pusieron en el colegio que estaba cercano a la calle Real, que regentaba un maestro llamado Don Esteban aficionado al castigo físico, no con una regla plana sino con un listón de madera, y al teatro-cine donde vi la película Ana de la famosa Silvana Mangano, en la que bailaba el bayón: 

/Ya viene el negro zumbón/ 
Bailando alegre el bayón/ 
Repica la zambomba / 
Y llama la mujer/.
/Tengo ganas de bailar/ 
El nuevo compás “vamo” “vamo”/ 
Dicen todos cuando me ven pasar/ 
Chica ¿Dónde vas?/ 
Me voy p′a bailar/ 
El bayón/

Prospecto de la pelicula Ana

Había tenido que entrar por la tramoya por donde me coló mi primo Antoñito, algo mayor que yo, hijo de mi tía Gracia, la mayor de las hermanas de mi padre. Y salí por una trampilla al patio de butacas. Mi primo Antoñito fue el único de mis muchos primos, que nunca faltó al sagrado deber de asistir a los entierros de su familia. Y por las paradojas de la vida no pudimos asistir al suyo. Murió lamentablemente joven. Una buena persona a la que trató mal la vida.

Media luna del río

Pero volviendo a los versos de Icaza, recuerdo que cuando subimos a la Torre de la Vela, nos habían visitado mis tías Antonia, hermana de mi madre y Maruja (política) mujer de mi tío Fernando hermano también de mi madre. Luego en mi memoria las sitúo a ambas ese día en Granada, en la Alhambra, con algunos chorros de agua de las fuentes, convertidos en carámbanos, aunque pudiera sobrar alguna de mis tías. La Granada de Agustín Lara, la Alhambra de los cuentos del vecino Washington Irving, de los versos de Icaza, de atardeceres del Nobel Ernest Hemingway(Clinton no me interesa) y de la Fuente del Avellano que nos contaba mi padre y cantaba Antonio Molina. 

Puente de la Virgen Pinos Puente

Son los problemas que nos ocasiona la memoria. El olor a rebaño de cabras, cuando en tu puerta te vendía el cabrero la leche, a temperatura corporal de la cabra. Formaba parte también del conjunto con el Piorno al fondo y las chimeneas de las casas del barrio de la Virgen al otro lado del Cubillas, desagüe del pantano del mismo nombre, porque el segundo río de Pinos estaba más al oeste, el Velillos. Para ir a Granada había que coger el tranvía, que discurría por las laderas de la Sierra Elvira, los polvorines militares con sus respiraderos, y el balneario, donde se fraguó la historia de amor entre la señorita motrileña de bien, Luisa Castanys y el médico del balneario Leandro Fernández, que dio origen a su familia muy apegada a la medicina.



“De mí querido amigo Leandro Jimena (ya fallecido, en su plenitud mental con 95 años)

Mi querido amigo Leandro Jimena me dice lo siguiente: “Mi familia como sabes es ‘granaina’, mi padre era atarfeño, mi madre motrileña y en el Balneario de Sierra Elvira mi abuelo materno Leandro Fernandez Osuna, era el médico del centro y allí conoció a mi abuela Luisa Castanys de la Torre, que había ido a tomar los baños y tomó marido, allá por los años 80 del siglo XIX, mi abuelo era de Palenciana (Córdoba) y el ambulatorio de allí se llama ‘Fernández Osuna’, ya ves que es natural que tu escrito me trajo a la memoria recuerdos imborrables, gracias por ello” Estas cosas son el mejor premio por la publicación en el blog. Mi amigo Leandro excelente endocrinólogo, tiene 92 años.

Estación del tranvia de Pinos Puente

De mi prima Gracia de Pinos.

Y por otro lado mi prima Gracia de Pinos Puente, me dice: “Hola primo espero que te encuentres mejor. Toda esa historia de Sierra Elvira es verdad yo he estado hace muchos años y había grietas que no te podías arrimar de la calor que salía. También allí había unas resculizas que se llaman los caballitos del rey. Un abrazo muy grande para todos” Le pregunté: ¿Qué eran resculizas prima? "–Pues unas piedras grandes que nos servían de toboganes." Haciendo un alarde personal de buscar una etimología de la palabra deduzco “res” de resbalar y “culizas” la parte donde la espalda pierde su noble nombre por la caliza". 

Puente de hierro del tranvía río Cubillas

Pero aclararé lo de la “Mala Follá”. Hay muchas versiones que tratan de justificarla, pero mi padre la tenía y mi madre cordobesa, se encargaba casi siempre de recordárselo. Esto es como los de los pegoletes cordobeses, herencia del fracaso profesional de Monsieur Pegaout, por derivación Pegos. Contaban que el declive del reino nazarí era debido a que las armas forjadas, lo estaban mal templadas como consecuencia de que los herreros no fuelleaban bien en las fraguas y no obtenían las temperaturas adecuadas. –!Nene dale al fuelle que fuelleas malamente, vamos que tienes muy mala follá! Le decía el herrero decadente al ayudante, aunque posiblemente el motivo de la cuesta abajo  fuese otro. Sin olvidar los engaños reales de la católica Isabel.

Fotografías del archivo del autor
Bibliografía del Blog Notas Cordobesas